mayo 8, 2025 OVACTransformación Digital

Brecha digital y servicios públicos: cómo OVAC acerca la administración a quienes más lo necesitan

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La brecha digital: un obstáculo persistente en la era de la conectividad

 

Vivimos en una sociedad cada vez más digitalizada, donde la conectividad y la tecnología son fundamentales para acceder a servicios esenciales, comunicarse con las administraciones o participar en la vida económica y social. Sin embargo, esta transformación no ha sido igual para todos: la brecha digital sigue afectando a millones de personas que, por diversos motivos, no pueden acceder o desenvolverse con soltura en entornos digitales.

Según Eurostat, en 2023 solo el 64,2% de la población española contaba con competencias digitales básicas, una cifra que aún está lejos del 80% que la Comisión Europea se ha propuesto alcanzar en 2030. Esta carencia no se distribuye de forma homogénea: mientras el 90% de los jóvenes entre 16 y 24 años utiliza Internet habitualmente, el porcentaje desciende al 63% entre los 65 y 74 años, y cae al 23% entre los mayores de 75, según el INE.

Pero el problema no es solo de uso: también es de acceso. De acuerdo con datos de la Fundación Ferrer i Guardia, aunque el 91,6% de la población española tiene acceso a Internet, muchas personas carecen del equipamiento adecuado o no disponen de los conocimientos necesarios para completar trámites administrativos online. El Informe Tecnología y Discapacidad, elaborado por la Fundación Adecco, revela que el 45% de las personas con discapacidad encuentran barreras al realizar gestiones digitales, y un 42% declara que su uso les parece “muy complejo y avanzado”.

Además, factores como el nivel de estudios, la renta, el género o el lugar de residencia influyen directamente en el nivel de autonomía digital. Las personas mayores, con discapacidad, en situación de exclusión social o residentes en entornos rurales son quienes más sufren las consecuencias de una digitalización que, sin acompañamiento, corre el riesgo de excluir.

Estos factores impactan en todos los ámbitos pero en la relación con la Administración, donde cada vez más trámites esenciales se gestionan exclusivamente online, su impacto negativo es aún más significativo, dado el carácter público y universal que deben tener los servicios públicos.

Esta brecha no es un mero desajuste temporal: es un obstáculo estructural que limita el acceso a derechos y servicios públicos, e impide que una parte significativa de la población se beneficie de las ventajas de la transformación digital. Combatirla no solo es una cuestión de eficiencia, sino también de equidad y cohesión social.

 

OVAC: una solución real, efectiva y disponible para reducir la brecha digital

 

Para dar respuesta a este reto estructural, la Oficina Virtual de Atención al Ciudadano (OVAC) se presenta como una solución efectiva para reducir la brecha digital, ya que aborda directamente los principales factores que alimentan la brecha digital:

• Ante la falta de competencias digitales, que impide a muchas personas completar trámites de forma autónoma, OVAC ofrece la posibilidad de acceder a la asistencia personalizada de un profesional de la administración, sin necesidad de desplazarse. Este servicio facilita la atención remota mediante videollamada, garantizando que los usuarios reciban el apoyo necesario para realizar los trámites de forma sencilla y eficiente, sin que el nivel de digitalización sea un obstáculo. Esto permite que cualquier ciudadano pueda completar sus trámites sin depender de familiares o terceras personas.
• Ante la dificultad de realizar trámites debido a la exigencia de instalar aplicaciones o certificados digitales, OVAC elimina esta barrera. Con nuestra aplicación, no es necesario descargar nada ni realizar complejos procesos de validación digital. Basta con disponer de un ordenador con cámara y micrófono, y desde allí el usuario puede realizar los trámites directamente con un gestor que guiará el proceso, firmando documentación si lo necesita sin necesidad de instalar nada. Así, se simplifica la interacción sin sacrificar la seguridad ni la eficiencia y se eliminan barreras técnicas que suelen frenar o frustrar al usuario medio.
• Ante la falta de conectividad y/o equipamiento digital, tanto en zonas remotas como entre colectivos con menos recursos, la Administración puede instalar puntos de atención cercanos a esas zonas o colectivos, desde los que acceder a OVAC de forma segura. De esta manera, las personas que carecen de los medios necesarios en su hogar pueden acceder a la administración pública sin tener que desplazarse largas distancias. Este modelo de atención descentralizada permite acercar los servicios a los ciudadanos, mejorando su acceso y garantizando una mayor inclusión digital. Una solución especialmente útil en zonas y municipios con población dispersa o envejecida.

 

Un ejemplo real de rotura de brecha digital con OVAC: atención personalizada de Tributs de Lleida en el municipio de Bellpuig

 

Un ejemplo destacado de la implementación de OVAC es el caso de la Diputació de Lleida que dispone de la solución para la atención remota y personalizada a ciudadanos y ha instalado un punto de atención en el municipio de Bellpuig, de 5.000 habitantes, a modo de piloto, antes de extender el servicio a otros municipios. Este punto permite a los ciudadanos realizar trámites relacionados con el área de Tributs, contando con la asistencia de un profesional a través de videollamada.

Esta iniciativa ha facilitado el acceso a servicios esenciales a los habitantes de Bellpuig y su zona colindante que tienen dificultades para desplazarse o limitaciones tecnológicas, demostrando cómo la tecnología puede ser una herramienta para la inclusión y la equidad.

 

Digitalización inclusiva y para todos

 

La brecha digital es un desafío que requiere soluciones innovadoras y centradas en las personas. La Diputació de Lleida y OVAC demuestran que es posible combinar la eficiencia de la tecnología con la calidez de la atención personalizada, garantizando que ningún ciudadano quede excluido de la transformación digital.

Desde Councilbox pensamos que es fundamental que las administraciones públicas y las organizaciones continúen implementando y ampliando este tipo de soluciones, asegurando que la digitalización sea inclusiva y beneficie a toda la sociedad.

Solo a través de soluciones pensadas desde lo local y centradas en las personas podremos garantizar que nadie quede atrás en la transformación digital.